República Dominicana se mantiene entre los mayores productores de banano del mundo, con más del 60% de su producción vendida a otros mercados bajo certificación orgánica. Durante 2017 las exportaciones ascendieron a US$198.1 millones, siendo Reino Unido (40%), Suecia (16%) y Bélgica (15) los importadores más grandes, según la Dirección General de Aduanas (DGA).
En este período Reino Unido importó US$80.1 millones, Suecia US$32.2 millones y Bélgica US$31.2 millones. Sin embargo, y debido a las tormentas que azotaron el país a finales de 2016 y en 2017 las exportaciones reflejan una caída de un 39%, cuando en 2016 se ubicaron en US$322.9 millones y el año pasado en US$198.1 millones, con una diferencia negativa de US$124.8 millones.
A pesar de esta situación y de acuerdo a una publicación de elDinero, el área de siembra del guineo se ha incrementado en un 29.8% (20,577 tareas) en los últimos tres años, al pasar de 68,985 tareas en 2014 a 89,562 tareas a noviembre de 2017.
De acuerdo al presidente de la Junta Agroempresarial Dominicana (JAD), Osmar Benítez, en los últimos cinco años el cultivo de banano ha experimentado un salto cuantitativo y cualitativo. “Se expandieron las áreas de siembra, y ha habido un proceso de reconversión productiva en la zona del Bajo Yaque, en la línea Noroeste”, señala.
Explica que terrenos que eran utilizados para sembrar arroz o zonas ganaderas se han convertido en áreas para banano, mientras que se ha ampliado la zona de siembra en Mao y se han incorporado algunas áreas en provincias que no se calificaban como comercializadoras de guineo, como es el caso de Santiago y Puerto Plata, mientras que en la región Sur se incorporaron Bahoruco y Ocoa.
Benítez destaca el aumento de la productividad por área sembrada de menos de una caja por tarea por semana, a más de una, y en casos excepcionales, en algunas fincas se consiguen entre dos o tres cajas y medias.
“En términos cuantitativos también ha aumentado la cantidad de productores, pues hoy en día contamos con 1,700, mientras que el número de fincas es de 1,815, cuando hace cinco años teníamos menos de 1,000”, señala.
Categoría premium
Con relación al banano orgánico, el presidente de la JAD explica que el 63% del guineo que se produce en el país está certificado por esa característica y que un 20% se encuentra en proceso de lograrla.
“Se toma entre 18 meses a dos años cambiar de cultivo tradicional a orgánico, así que cuando se complete este tiempo, al final de este año, tendremos cerca del 83% de banano orgánico”, resalta.
Explica que el banano orgánico tiene “un precio premium” por encima del tradicional, mientras que una caja de guineo convencional cuesta ocho dólares a nivel de finca, el orgánico paga hasta dos dólares de diferencia.
Benítez señala que el país sigue siendo el primer exportador mundial de banano orgánico con más de 400,000 toneladas al año, y sostiene que ningún otro país exporta banano de comercio justo (Fairtrader) como República Dominicana.
Con respecto a los daños causados por las lluvias, explica que la producción cayó un 25%, afectando a más de 80 mil tareas, pero se han aplicado técnicas de rebrote y muchas de esas áreas se encuentran en una etapa de crecimiento vegetativo.
Producción de banano
El saliente director del Centro de Exportación e Inversión de la República Dominicana (CEI-RD), Luis Henry Molina, ha destacado que en la zona Norte el 60% de la producción agrícola es de banano, mientras que en el Sur es de 12% y en la región Central de 11%.
Molina señala que en 2016 la producción dominicana de este rubro alcanzó casi 42 millones de racimos. Para ese mismo año, las exportaciones de banano representaron el 72.1% de las exportaciones totales de frutas comestibles del país.
El presidente de la Asociación de Bananeros de Exportación de Montecristi (Asexbam), Félix Antonio Sánchez, sostiene que el proceso de producción para este 2018 es un poco bajo, debido a los fenómenos atmosféricos del año pasado, incluyendo el paso cercano de los huracanes Irma y María.
Sin embargo, sostiene que entre 2012 y 2017 las exportaciones crecieron aproximadamente un 35%, y se exportaron unas 350 mil cajas de guineo semanal.
Cada caja consta de entre 120 unidades, en caso del orgánico, y 112 el convencional. Sánchez señala que en la actualidad el objetivo de los productores es exportar 700 mil cajas a la semana.
“En el país tenemos alrededor de 1,850 productores y el 80% produce guineo orgánico, esta es una producción más costosa que la tradicional, pero gracias a nuestra ubicación geográfica y al clima, tenemos mejores condiciones para producir por encima de los países centroamericanos”, señala Sánchez.
Mientras que para el mercado local, señala que el consumo de guineo también aumentó, “seis años atrás solo se consumía yuca y plátano, pero cuando el dominicano aprendió a comer guineítos el producto se convirtió en uno de los líderes en las mesas dominicanas”, dijo.
Sánchez sostiene que el guineíto se comercia de tres a cuatro pesos y que en el mercado local no enfrenta retos más allá de los de la naturaleza, sin embargo, a nivel internacional el panorama es diferente.
“Tenemos países como Costa Rica, Ecuador y Colombia que han aumentado los volúmenes de producción, con un costo menor que el nuestro, por esta razón estamos preparando a los productores para que por lo menos produzcan dos cajas y media de guineos por tarea, para ser competitivos”, agregó.
Mientras que el presidente de la Asociación Agrícola Monte de Sión (Asamsi), de Mao, Marcos Rodríguez, explica que a finales de 2016 y durante el 2017, debido las tormentas que afectaron el país, en la zona Noroeste la producción de banano se redujo considerablemente al pasar de más de 400,000 cajas semanales a menos de 300,000.
“Ahora mismo se necesita liquidez para que los productores puedan darle seguimiento a los cultivos, antes de atravesar estas tormentas en la zona Norte se estaban cosechando todas las cajas que se necesitaban, ya que esta zona representa en un 90% la producción de banano y abarcamos desde Santiago hasta Montecristi”, sostiene.
Desafío
De acuerdo al informe “El monitor de Industria y Comercio”, publicado en octubre de 2017, durante el período 2010-2016 las exportaciones crecieron a un ritmo superior al del PIB, con excepción del 2015. El estudio señala que ese dinamismo se explica, principalmente, por el crecimiento registrado en el subsector Exportaciones Nacionales (minería, bananos y otros).
Destaca que durante el período de referencia, el desempeño exportador ha sido positivo, gracias en parte a las exportaciones de banano orgánico, que aumentaron de manera sobresaliente. Señala que el desafío de política es mantener este crecimiento y diversificar los productos hacia otros países.
En Centroamérica y República Dominicana se cultivan 765 mil hectáreas de frutas (29% de la producción agropecuaria) y se generan 400 mil empleos al año, sólo en el cultivo de frutas. El banano, naranja, plátano, piña, coco, mango, melón, aguacate, limón, marañón, sandía y lechosa son las principales frutas cultivadas en la región.
El banano como producto comercial
El banano (Musa acuminata AAA) también llamado guineo, es la fruta tropical más consumida en el mundo, siendo cultivada en más de 128 países. El fruto tarda entre 80 y 180 días en desarrollarse y contiene una gran cantidad de vitaminas (A, B y C) y minerales, según un informe realizado por ProDominicana.
Según un estudio de ProDominicana, titulado “Sector bananero en República Dominicana”, la planta del banano es propia de regiones tropicales y subtropicales. Las temperaturas ideales para su cultivo oscilan entre los 26º y 27ºC, con una humedad constante y lluvias extendidas, pues necesita de abundante agua.
El informe explica que se conocen alrededor de 500 variedades del banano, provenientes de todas las regiones tropicales, aunque las variedades del grupo Cavendish son las más cultivadas en el mundo.
En 1896 en República Dominicana, se instaló la primera empresa extranjera que produjo este fruto comercialmente y en 1951 se instaló en Azua la Dominican Fruit, la cual operó hasta 1966, a partir de la renovación del puerto de Manzanillo, en la década de 1990, el país se convirtió en un gran exportador de este producto, específicamente hacia Europa, con concentración en el banano orgánico, de gran aceptación en ese mercado.